Esta es una canción que habla de un tiempo que se nos está escapando, que resbala de nuestras manos como un pez. Es una canción que habla de un árbol viejo que el progreso corta, porque el progreso parece que ha de cortar árboles para avanzar y de destrozar lo que encuentre a su paso, si no, parece que no progresa. Es una canción a la que le tengo mucho cariño y me ha acompañado muchas horas, cuando veo los desastres que me entristecen, los desastres que el paisaje padece por obra y gracia del llamado Rey de la Creación...
(Manolo García - Llanto de Pasión)
Este doble CD es, sin lugar a dudas, la grabación con grabadora que mejor se escucha, a pesar de que en algún momento se puede oír la gente que había cerca de la grabadora.
La historia que se encierra detrás de esta grabación (ecualizada por ordenador) y del diseñador de la portada parte del lucro, ya que antes de que se consiguiera, el que lo grabó y ecualizó intentó venderlo por diversos foros. Y seguro que vendió una copia, copia que fue compartida de forma gratuita en Petaos.net en el mismo año 2002.
El concierto está completo y plagado de sorpresas, rescatando viejos temas de El último de la Fila como Sin Llaves o A pedir tu mano, o cuando se le pira al final de Prefiero el Trapecio.
Otra de esas sopresas, es Manolo García recitando un poema de Luis Cernuda titulado Déjame esta voz:
Déjame esta voz que tengo,
Lo mismo que a la pampa le dejan
Sus matorrales de deseo,
Sus ríos secos colgando de las piedras.
Déjame vivir como acero mohoso
Sin puñas, tirando en las nubes;
No quiero saber de la gloria envidiosa
Con rabo y cuernos de ceniza.
Un anillo tuve de luna
Tendida en la noche a comienzos de otoño;
Lo di a un mendigo tan joven
Que sus ojos parecían dos lagos.
Me ahogué en fin, amigos;
Ahora duermo donde nunca despierto.
No saber más de mí mismo es algo triste;
Dame la guitarra para guardar las lágrimas.
Lo mismo que a la pampa le dejan
Sus matorrales de deseo,
Sus ríos secos colgando de las piedras.
Déjame vivir como acero mohoso
Sin puñas, tirando en las nubes;
No quiero saber de la gloria envidiosa
Con rabo y cuernos de ceniza.
Un anillo tuve de luna
Tendida en la noche a comienzos de otoño;
Lo di a un mendigo tan joven
Que sus ojos parecían dos lagos.
Me ahogué en fin, amigos;
Ahora duermo donde nunca despierto.
No saber más de mí mismo es algo triste;
Dame la guitarra para guardar las lágrimas.
Aunque Manolo diga que es del poeta Vicente Huidobro, también recita un poema de Luisa Futoransky llamado Razón de Anatomía y que dice así
me he besado con poetas, pintores, cineastas
empleadas, jew princesses, rateros, hippies
ingenieros, tenores, guerrilleros
en mi boca todos los caminos de la vida
es tiempo/ de ocuparme de mis pies.
empleadas, jew princesses, rateros, hippies
ingenieros, tenores, guerrilleros
en mi boca todos los caminos de la vida
es tiempo/ de ocuparme de mis pies.
*Diseño Portada: Anónimo
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